Los deportistas de alto rendimiento tienen un nivel de actividad mayor y más intensa, su organismo está sometido a un sobre esfuerzo, y sus metas son distintas, por lo que presentan necesidades diferentes que deben individualizarse en cada paciente y en cada momento. Deben tener claro que el tipo de alimentación debe ser ante todo equilibrado. Es muy importante la variedad de los alimentos (más variado, más nutrientes) mientras que los vegetales (frutas, verduras, frutos secos y semillas) deben estar presentes en cada comida principal, además de consumir carnes, pescados (proteína de buena calidad), asegurándose que se consuman una ingesta adecuada de todas las vitaminas y los minerales esenciales.
La nutrición es un elemento clave de la preparación del deportista disciplinado, la dieta afecta el rendimiento deportivo y los alimentos que se eligen consumir durante el entrenamiento y la competición afectarán el resultado de los mismos. Una dieta adecuada ayudará a soportar un entrenamiento intenso, constante, a la vez que reducirán los riesgos de enfermedad o lesiones.
Mantener una adecuada hidratación es importante para el rendimiento físico y mental. La ingesta adecuada de líquidos antes, durante y después del ejercicio físico es importante.
El alimento es una parte importante de la vida, y los deportistas deberán disfrutar de los alimentos que consumen con la confianza de haber realizado elecciones inteligentes.
