Un buen control metabólico reduce la aparición y progresión de complicaciones crónicas que son las responsables de la pérdida de años de vida y del deterioro de la calidad de vida por eso es clave en el buen control de la enfermedad.
Más de la mitad de las personas que padecen diabetes tipo 2 tienen mal control metabólico, es decir una hemoglobina glicosilada (nivel de glucosa medio de los últimos tres meses) superior a lo objetivo, poniendo en riesgo su salud cardiovascular.
Con los diferentes programas dietéticos se obtiene un mejor control de glucosa por lo tanto mejor control metabólico así evitar las descompensaciones agudas, prevenir o retrasar la aparición de complicaciones tardías de la enfermedad, disminuir la mortalidad y mantener una buena calidad de vida.
Actualmente contamos con una aianza de trabajo, la cual procura una atención integral a pacientes con afectaciones de diabétes, tales como el pié diabético.
Esta elianza además de agilizar la atención, también considera un servicio preferente.
